Yo, caminante entre los bosques
mas frondosos y enreversados,
o simples y sencillos
caminos al olvido...
Tu, angelica criatura,
que solloza al cielo,
alegria en gotas de lluvia,
o tristeza
sobre mis mejillas...
Lagos de azucar y chocolate,
caramelos como naufragos,
y canela como el barco naufragado,
llegan juntos a tu playa, de dunas.
Dunas que no son de soledad,
sino de irrefrenable felicidad.
Sueño XVIII - Henry J. White - 12.10.09
La felicidad, la ansiada felicidad...esa que nunca es como se pinta...(caprichoso destino)
ResponderEliminarsonrisas!